La imagen de ciudades deslizándose lentamente hacia el mar parece ciencia ficción, pero la realidad es que un país está experimentando un fenómeno similar: el hundimiento de gran parte de sus urbes. Mientras el nivel del mar global sube de forma constante, unos 22 centímetros desde 1880, según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de EE. UU. (NOAA), un nuevo estudio revela que la tierra de muchos departamentos de Estados Unidos está cediendo.
Alarma del Conicet: el Perito Moreno está retrocediendo a un ritmo sin precedentesUn equipo de científicos de Virginia Tech investigó el posible desplome de las ciudades de Estados Unidos. Su estudio, publicado en la prestigiosa revista Nature Cities, rastreó la tasa de hundimiento, conocida como subsidencia, en 28 grandes ciudades de este país de América del Norte.
Y los resultados fueron asombrosos: al menos el 20% del área urbana de todas las ciudades estudiadas está hundiéndose en alguna medida. Más aún, en 25 de esas 28 ciudades, más del 65% de la superficie terrestre está cediendo en diversos grados. El caso más extremo encontrado fue el de Houston, Texas, donde algunas áreas de la ciudad se hunden hasta 10 milímetros por año.
Un fenómeno silencioso que afecta a todo el país
Originalmente, se pensaba que este problema afectaba principalmente a las grandes ciudades costeras como Nueva York, Los Ángeles o Houston. Sin embargo, la investigación demostró que el hundimiento no es exclusivo de la costa; ciudades tierra adentro como Las Vegas, Denver, Nashville, Oklahoma City e Indianápolis también muestran signos claros de este deslizamiento gradual. Esto indica que el fenómeno está mucho más extendido de lo que se creía.
Las implicaciones de esta subsidencia, aunque medida en milímetros por año, son más complejas de lo que uno podría imaginar a primera vista. No se trata solo de la posibilidad de que las ciudades "se deslicen hacia el mar". Como señala Leonard Ohenhen, ex estudiante de posgrado de Virginia Tech y autor principal del estudio a Popular Mechanics, "incluso los ligeros desplazamientos hacia abajo en la tierra pueden comprometer significativamente la integridad estructural de edificios, carreteras, puentes y ferrocarriles con el tiempo". Esto plantea problemas prácticos y a corto plazo para planificadores urbanos y propietarios de viviendas.
¿Por qué se están hundiendo?
Las causas de este hundimiento varían según la ciudad, pero la principal culpable suele ser la extracción de aguas subterráneas. Este proceso reduce la presión de los poros en los acuíferos, lo que lleva a la compactación de los sedimentos de grano fino y, en última instancia, al hundimiento del terreno. Susanna Werth, coautora del estudio de Virginia Tech, explicó: "tal subsidencia terrestre se ha observado en todo Estados Unidos durante muchas décadas, pero su creciente relevancia en las áreas urbanas es especialmente peligrosa".
Sin embargo, la extracción de agua no es la única razón. En algunas regiones del país, el hundimiento se debe al "efecto de balancín" del lecho rocoso causado por el retroceso de los glaciares de la última era de hielo. En el oeste, en ciudades como Portland, Seattle y San Francisco, la tectónica de placas también juega un papel. Incluso los estados más lejanos no se salvan: en Alaska, la degradación del permafrost es el principal factor, mientras que en Hawái, ciertas áreas de O'ahu se hunden hasta 25 milímetros por año debido a construcciones sobre relleno artificial.